Empresas, asociaciones empresariales y otras entidades podrán solicitar a partir de este miércoles subvenciones para promover acciones formativas de corta duración en competencias concretas
El objetivo de este programa es mejorar y actualizar la formación de más de 12.000 aragoneses
El departamento de Economía, Planificación y Empleo pone en marcha un nuevo programa de ayudas para financiar acciones formativas dirigidas a la cualificación y recualificación de la población activa, vinculadas a sectores estratégicos y con líneas específicas para la capacitación ligada al cuidado de las personas y para municipios de menos de 20.000 habitantes. El Boletín Oficial de Aragón (BOA) publicará este martes las bases reguladoras y la convocatoria de estas subvenciones del INAEM, que contarán con un presupuesto de 6,63 millones de euros, financiado con fondos europeos Next Generation EU. El objetivo es mejorar la formación de más de 12.000 aragoneses.
Empresas, asociaciones empresariales, entidades sin ánimo de lucro y centros de formación podrán solicitar hasta el 30 de septiembre estas nuevas subvenciones para promover acciones de “upskilling” y “reskilling” (cualificación y recualificación). El objetivo es reorientar y aprovechar el talento disponible ofreciendo formación concreta en competencias emergentes y muy demandadas en el actual mercado laboral. Por ello, la formación se plantea en módulos de entre 30 y 60 horas de duración, centrada en competencias específicas, de rápida evolución y con prospectiva en la generación de empleo, y estará vinculada a cualificaciones profesionales en sectores estratégicos y a la mejora de las capacidades para la transición ecológica.
Este nuevo programa contará con tres líneas de subvenciones diferentes. La primera –a la que se destinará más de la mitad del presupuesto- estará dirigida tanto a empresas y agrupaciones empresariales que promuevan formación para actualizar las competencias de sus trabajadores, como a entidades sin ánimo de lucro que ofrezcan propuestas formativas, dirigidas a desempleados o colectivos vulnerables, que les permitan acreditar las competencias profesionales que han adquirido gracias a su experiencia laboral.
La segunda línea de ayudas estará destinada específicamente a acciones desarrolladas por entidades de formación y que estén vinculadas específicamente con el cuidado de las personas. Entre ellas, se incluyen módulos de capacitación relacionados con el cuidado a la infancia, a personas con discapacidad o a personas dependientes en general. Además, habrá una tercera línea de subvenciones exclusiva para acciones dirigidas a trabajadores que vivan en municipios de menos de 20.000 habitantes, que se desarrollen en zonas de riesgo de despoblación y que den respuesta a necesidades del actual mercado laboral.
Las acciones podrán estar orientadas a un amplio abanico de sectores estratégicos, entre los que se incluyen las tecnologías de la información, maquinarias y herramientas automatizadas y robótica, equipos aeronáuticos o de transporte ferroviario moderno, vehículos basados en energía, maquinaria agrícola, nuevos materiales, biofarmacia y productos médicos avanzados, logística y transporte, hostelería y turismo, o servicios de atención a personas.
Esta convocatoria se enmarca dentro del plan para transformar y modernizar el sistema de formación profesional para que se configure como uno de los ejes vertebradores de un nuevo modelo económico basado en el conocimiento, capaz de dar respuesta a las constantes transformaciones de los sectores productivos, mantener la empleabilidad de las personas trabajadoras y, por extensión, mejorar la productividad y la competitividad de las empresas.
Fondos MRR
En 2022 los programas de empleo del INAEM impulsados con fondos europeos Next Generation, en concreto del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), permitieron mejorar la empleabilidad de 11.500 personas en Aragón. Entre ellos, desatacan programas innovadores para dar una primera oportunidad laboral a jóvenes cualificados con contratos de calidad, pero también acciones dirigidas a mujeres o personas con discapacidad, y nuevas líneas de ayudas que han permitido fomentar la creación de nuevos puestos de trabajo y el mantenimiento de los ya existentes en microempresas, autónomos y entidades de economía social del medio rural.
