Las visitas guiadas, una conferencia y un concierto de música medieval serán las primeras actividades culturales que se desarrollen en el Monasterio de la Resurrección como parte del convenio suscrito a finales de 2021 entre el Área de Vicealcaldía, Cultura y Proyección Exterior del Ayuntamiento de Zaragoza y las Canonesas Regulares del Santo Sepulcro con objeto de avanzar en la difusión del patrimonio existente en el monasterio entre la ciudadanía a través de iniciativas culturales y, a su vez, alcanzar la recuperación de la zona de la muralla romana y los contrafuertes y exterior del muro del refectorio, adyacentes a la cocina.
La primera de estas actividades tendrá lugar el próximo sábado 12 de marzo, cuando Zaragoza Turismo realice la visita guiada titulada ‘El Monasterio Mudéjar’, que recorrerá el antiguo torno, Iglesia conventual, Sala Capitular, claustro y refectorio. Serán grupos de 30 personas, en tres turnos diferentes: 10:30, 11:45 y 13:00 horas, con una duración aproximada de una hora. Los tickets, que serán gratuitos, se pueden reservar a través de las Oficinas de Turismo.
Del mismo modo, el viernes 18 de marzo, la Iglesia de San Nicolás será el lugar donde se imparta una conferencia por parte de Wifredo Rincón, doctor en Historia, investigador del CSIC y académico de número de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis de Zaragoza, además de ser el mayor experto en el pintor aragonés Francisco Pradilla. La entrada será sin inscripción y hasta completar el aforo, que está fijado en 90 personas. La conferencia comenzará a las 18.00 horas y, tras la charla, se podrá visitar y admirar el claustro y la sala capitular del monasterio.
Asimismo, las actividades culturales en el monasterio se completarán en marzo con un concierto de música medieval el viernes día 25, a las 18.00 horas, a cargo de Andrés y Cía. El lugar elegido es la Iglesia del Santo Sepulcro (Iglesia Conventual del Monasterio) y la entrada también será gratuita y hasta completar aforo, estipulado en 60 personas.
UNA JOYA MUDÉJAR
El objetivo de estas iniciativas es dar a conocer una de las joyas mudéjares de la capital menos conocidas: el Monasterio de la Resurrección de las canonesas del Santo Sepulcro. El complejo se levanta sobre los restos de las viejas murallas romanas, y su fundación se remonta al siglo XIV. Se trata del único ejemplo de arquitectura conventual mudéjar que ha sobrevivido completo en la ciudad hasta nuestros días y por su peculiar importancia fue declarado Monumento Nacional ya en 1893, incluido en la lista genérica de monumentos mudéjares de Aragón considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2001.
Todo ello se hace más especial en este 2022 dado que la UNESCO ha animado a celebrar y difundir el 50 aniversario de la Convención del Patrimonio Mundial, por la que se han ido declarando a lo largo de este medio siglo los lugares con un “valor universal excepcional que pertenecen al patrimonio común de la humanidad”. La Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO incluye en la actualidad un total de 1.121 sitios (869 culturales, 213 naturales y 39 mixtos) en 167 Estados Partes, y en ella se encuentra la arquitectura Mudéjar de Aragón, que también se puede admirar en el Monasterio de la Resurrección de las Canonesas de Santo Sepulcro.
CONSERVACIÓN DE LA MURALLA
El Ayuntamiento de Zaragoza firmó en noviembre de 2021 un convenio de colaboración con las Canonesas Regulares del Santo Sepulcro para la conservación y difusión del patrimonio existente en el también denominado Monasterio de la Resurrección. Con carácter genérico, la colaboración de las Canonesas Regulares del Santo Sepulcro se centra en el desarrollo de diversas actividades, como la realización de visitas culturales guiadas o la cesión de la Iglesia de San Nicolás y la del propio Monasterio para la realización de actividades culturales, adecuadas al espacio, y en cualquier caso acordadas por ambas partes, asegurando la salvaguarda del patrimonio histórico, artístico y espiritual. Así mismo la comunidad de canonesas asume el proyecto la musealización e iluminación del espacio interior de la muralla.
Por su parte, el Ayuntamiento de Zaragoza ha asumido la intervención en la adecuación y limpieza de la parte interna de la muralla romana y los contrafuertes y exterior del muro del refectorio. Estos tramos se encuentran en un pasillo interior del monasterio y que da acceso, desde el claustro, a la cocina medieval del cenobio. La parte de muralla conservada en este pasillo corresponde a la cara interior del tramo visible desde la calle Coso y plaza del Sol de Zaragoza. Este tramo se encontraba cubierto, casi en su totalidad, por revoques y enlucidos de época moderna, de yeso en el primer sector, y de cemento en el segundo. Esta situación impedía la visión de la cantería original además de generar problemas de humedades al aumentar la higrospicidad del lienzo de sillería. Resultaba imprescindible la recuperación de la muralla romana y el contrafuerte y muro exterior del refectorio, para recuperar este espacio y con el objeto de minimizar las pérdidas del patrimonio cultural. Estas obras emprendidas por el Ayuntamiento de Zaragoza ya han finalizado y en la actualidad se está musealizando el espacio gracias a las Canonesas Regulares.
