El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y el Director de Inversiones y director general de la Península Ibérica de Xior Student Housing, Bastiaan Grijpink, han suscrito esta mañana el contrato por el que la empresa convertirá el antiguo Cuartel de Sangenis en una residencia universitaria.
La firma ha tenido lugar en el mismo cuartel de Pontoneros y ha dado el pistoletazo de salida a la construcción de una residencia de estudiantes cuya primera fase estará lista en junio de 2023 y que estará plenamente operativa en septiembre, para el arranque del curso 2023-2024.
La futura residencia supone una inversión de 23,5 millones de euros y unos ingresos para el Ayuntamiento de Zaragoza de 8 millones de euros en concepto de canon del derecho de superficie, 6 millones más de lo establecido en los pliegos que marcaron las condiciones del proyecto.
En la firma del contrato también han estado presentes el consejero de Urbanismo y Equipamientos, Víctor Serrano; la consejera de Infraestructuras, Vivienda y Medio Ambiente, Patricia Cavero; la concejal delegada de Vivienda, Carolina Andreu; el gerente de Zaragoza Vivienda, José María Ruiz de Temiño; el presidente de la Junta municipal del Casco Histórico, Alfonso Mendoza; el Rector de la Universidad de Zaragoza, José Antonio Mayoral; y el Asociado de Inversión y Finanzas de Xior Student Housing NV, Manuel Giménez.
Con esta rubrica, se impulsa y desbloquea un proyecto que llevaba 11 años atascado. Y es que, fue en junio de 2010 cuando el Gobierno de Zaragoza encargó, por primera vez, un estudio a Zaragoza Vivienda para rehabilitar y construir alojamientos en el antiguo cuartel de Pontoneros. Desde entonces el Gobierno de la ciudad ha realizado tres encargos más sin que ninguno de ellos haya salido adelante.
Las parcelas donde se construirá la residencia están ubicadas en la calle Madre Rafols, 4 y Madre Rafols, 8-10-12. Se trata de edificios que en su día albergaron el antiguo cuartel de Pontoneros y que, a partir de ahora, se destinarán a la promoción, construcción y gestión de alojamientos universitarios.
La formalización del contrato ha servido para conocer cómo será la futura residencia de Pontoneros. Albergará un total de 351 habitaciones para un total de 388 plazas. Habrá 10 tipos de habitaciones:
- 122 habitaciones individuales. Compuestas por cama, escritorio, mobiliario de almacenaje, nevera pequeña, microondas y baño individual.
- 34 habitaciones individuales “básicas”. Tienen las mismas características que las individuales pero con un espacio algo más reducido.
- 61 habitaciones individuales premium. A las individuales estándar se suma espacio y cocina con fregadero y dos fuegos.
- 10 habitaciones accesibles. Se trata de habitaciones que cumplen con el Código Técnico de Accesibilidad, para personas con movilidad reducida. Están dotadas de cama, escritorio, mobiliario de almacenaje, nevera pequeña, microondas y baño individual.
- 4 habitaciones accesible premium. Dotadas además de con los elementos de la accesible estándar con fregadero y dos fuegos.
- 23 habitaciones dobles “básicas”. Se trata de célula doble con dos camas, dos escritorios, y dos conjuntos de mobiliario de almacenamiento y nevera y microondas y baño compartido.
- 7 habitaciones triples “básicas”. Tres conjuntos de cama escritorio y mobiliario y baño compartido.
- 32 habitaciones de núcleo compartido. Se trata de dos habitaciones individuales que comparten baño con elementos separados y elementos de cocina.
- 46 habitaciones “Clúster”. Son cuatro o cinco habitaciones individuales que dan a un espacio común con sala de estar y cocina.
- 12 apartamentos. Pensados para residentes de doctorado, profesores visitantes o personal invitado por la Universidad de Zaragoza. Se encuentran el las plantas más altas y cuentan con dos espacios, uno de sala de estar y cocina y otro con zona de descanso y estudio. También, con zona de almacenaje y baño completo.
Los edificios, cuyas obras comenzarán en el primer semestre de 2022, contarán con rampas y ascensores accesibles y en ellos está prevista la implantación de sistemas de generación de energía que aprovechen las fuentes de energía renovables y sistemas con recuperación como paneles solares fotovoltáicos o paneles solares térmicos.
SERVICIOS Y ACTIVIDADES CULTURALES ABIERTOS A LA CIUDAD
La residencia de Xior contará con servicios propios para los usuarios como lavandería, 13 salas de estudio, gimnasio, trasteros para los meses de verano, comedor o cocina pero tendrá también servicios abiertos al barrio como aparcabicis, cafetería, salas de estudio, salas de conferencias y multiusos, talleres de idiomas y cultura, biblioteca y coworking y cargadores de vehículos eléctricos.
En la parte trasera del que fuera edificio de viviendas se encuentra un desnivel en el que se formará un graderío natural integrado en la plaza José María Forqué. Este espacio de antiguas ruinas se mejorará con la protección de los restos y se ajardinará para que pueda ser utilizado como un espacio polivalente de eventos, teatros, conciertos y graduaciones. Será un elemento clave para los usos de la residencia y tendrá fundamentalmente fines culturales y educativos.
La oferta de actividades culturales abiertas al barrio de Xior contempla un “Embajador Xior”. Se trata de estudiantes que vivan en la residencia y se encarguen de organizar y promover las actividades culturales organizadas. Además, se creará una plataforma para que los posgraduados que residan en la residencia compartan sus conocimientos y experiencias en sesiones temáticas, por ejemplo, en tertulias y conferencias de temas de actualidad.
La residencia también contará con la figura del “coordinador cultural”, es decir, un responsable de fomentar y ejecutar todas las actividades e iniciativas culturales y de un “representante del barrio” para que dé a conocer de primera mano a los vecinos los actos y eventos culturales que tengan lugar en la residencia.
EGENERACIÓN DE ZAMORAY-PIGNATELLI
La rehabilitación de Pontoneros y su transformación en una residencia universitaria es uno de los ejes principales en los que se basa el Plan Especial de Zamoray-Pignatelli con el que el Ayuntamiento de Zaragoza pretende regenerar esta zona de la ciudad.
Con la ejecución de este proyecto, el Gobierno de Zaragoza, relanza un conjunto arquitectónico que llevaba abandonado desde finales de los años 80 y contribuirá al impulso del barrio y de la calidad de vida de los vecinos.
Vecinos que, como se acaba de detallar, van a poder jugar un papel importante en las actividades organizadas por la residencia así como disfrutar de sus servicios comunes.
CONVENIO CON LA UNIVERSIDAD DE ZARAGOZA
El pasado mes de abril el alcalde de Zaragoza y el rector de la Universidad de Zaragoza firmaron un convenio por el que ambas instituciones establecieron un marco de colaboración con el fin de desarrollar un nuevo programa de alojamiento de la comunidad universitaria en la residencia de estudiantes proyectada en los inmuebles municipales del antiguo Cuartel de Pontoneros.
El convenio reservaba cinco plazas para personal investigador de la Universidad de Zaragoza en las futuras instalaciones. La cifra, finalmente, se ha ampliado a 12 apartamentos reservados para investigadores y postdoctorales.
