La provincia española de Aragón es un ejemplo de transformación en el sector agroalimentario. En pocos años, las exportaciones cárnicas aragonesas han experimentado un cambio notable.
En 2016, las ventas al exterior del sector supusieron casi 622 millones de euros. En poco más de un lustro, impulsadas por el crecimiento de la producción porcina, la provincia cerró 2022 con unas exportaciones de más de 1.716 millones de euros, lo que supone un incremento del 176%.
El dinámico aumento de las ventas internacionales de carne de cerdo, ya sea fresca, refrigerada o congelada, experimentó un crecimiento significativo tanto en 2019 como en 2020, superando el umbral de los 1.300 millones de euros. Esta notable cifra siguió superándose en 2021 y 2022, aunque con una trayectoria ascendente más constante. Los últimos datos facilitados por el Gobierno de Aragón para el año anterior indican que las exportaciones de carne de porcino ascendieron a 1.347 millones de euros, una cifra muy similar al récord de 2020.
Profundizando en los datos específicos del sector, es evidente que la carne de porcino tuvo un peso económico significativo, representando el 78,5% de las exportaciones de carne en 2022. Sin embargo, este impresionante dominio no debe eclipsar las aportaciones de otros subsectores como el vacuno, con un 7,9%, y los despojos comestibles de especies como el ovino, porcino, vacuno y caprino, que suponen el 8,9% de la cuota exportadora.
Carmen Urbano, Directora General de Promoción e Innovación Agraria del Gobierno de Aragón, arroja luz sobre el espectacular crecimiento que ha experimentado la industria cárnica. La evolución del sector ha propiciado un aumento de las ventas, como señala Urbano, y Aragón se ha convertido en sede de importantes productores cárnicos, sobre todo de porcino, además de una notable presencia en vacuno de carne.
En este panorama de evolución de las exportaciones, cabe destacar que China, Italia y Japón se han situado a la cabeza de las importaciones de carne aragonesa. A lo largo de los años, China ha tomado la delantera como mayor importador, con una valoración en 2022 de 280 millones de euros, lo que supone un aumento sustancial respecto a los poco más de 100 millones de euros de cinco años antes. Italia, que antes encabezaba la lista, sigue ahora a China, y Francia y Portugal ocupan el tercer y cuarto puesto.
En particular, Japón se ha convertido en un actor clave en el ámbito de la exportación de carne. El mercado nipón es respetado por su profesionalidad y madurez, y constituye una plataforma de prestigio para mostrar la calidad de los productos y las empresas aragonesas. Esta diversificación de mercados ha sido una estrategia crucial para hacer frente a retos imprevistos, como se vio durante la crisis de la peste porcina africana que perturbó la industria porcina de China.
La historia de éxito de Aragón en la industria cárnica es una historia de transformación, diversificación y calidad. En un mercado mundial en constante expansión, los productores de carne y los ganaderos de la provincia han conseguido no sólo adaptarse, sino prosperar. A medida que los mercados internacionales siguen evolucionando, las lecciones del viaje de Aragón ofrecen valiosas perspectivas a los productores de todo el mundo. Las pioneras exportaciones de carne de la provincia a países como China, Italia y Japón ejemplifican el rico potencial de un enfoque estratégicamente gestionado y centrado en la calidad.