La Agrupación Europea de Cooperación Territorial (AECT) Pirineos-Pyrénées lidera el Proyecto HERMES, una iniciativa que destinará 1,9 millones de euros en Aragón para mitigar los riesgos asociados al cambio climático en el Pirineo central.
Estas actuaciones, que forman parte de un programa transfronterizo con un presupuesto total de 3,38 millones de euros, se desarrollarán entre 2024 y 2027, con la financiación mayoritaria del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
El Proyecto HERMES es una apuesta estratégica para reforzar la resiliencia del Pirineo frente a los fenómenos naturales agravados por el cambio climático. Con un 65% de su presupuesto financiado por la Unión Europea a través de los fondos FEDER, las intervenciones en Aragón incluyen obras clave en carreteras, estudios de riesgo y la instalación de infraestructuras de protección.
En la carretera A-136 hacia el Portalet, en Formigal, se construirá un muro para evitar la erosión del río Gállego y prevenir movimientos del terreno. Por su parte, en el acceso sur del túnel de Bielsa-Aragnouet, se realizarán trabajos de protección contra avalanchas. Otra actuación destacada será la instalación de paravalanchas entre Panticosa y el Balneario de Panticosa, en los kilómetros 6 al 10 de la carretera A-2606, junto con la ampliación de estructuras en la vertiente conocida como “Los Lazos” y el cerramiento de tres paravalanchas existentes.
En el ámbito de los estudios y prevención, el municipio de Canfranc será otro de los beneficiados. Se invertirán 165.000 euros para evaluar la frecuencia e intensidad de riesgos como aludes, movimientos de terreno y avenidas torrenciales. Además, el Ayuntamiento de Canfranc destinará 250.000 euros a la instalación de estaciones nivometeorológicas, cámaras robotizadas y una red de pértigas que permitirán medir la altura de la nieve con mayor precisión. También se elaborará un Plan Municipal de Protección Civil.
Estas medidas buscan no solo proteger infraestructuras estratégicas, sino también garantizar la seguridad de las comunidades locales y los visitantes de la región, respondiendo de manera directa a los desafíos impuestos por el cambio climático. El Proyecto HERMES refuerza así la cooperación transfronteriza entre España y Francia, promoviendo un Pirineo más seguro y sostenible para el futuro.
