Para la celebración del Día Internacional de la Reparación, Herco ha organizado un Repair Café especial con sorteos y otras propuestas para toda la familia
La reparación, un derecho reconocido por el Parlamento Europeo, evita la proliferación de basura, particularmente electrónica, que cada año crece en el planeta
Sorteos, reparaciones de récord, y mucho más, serán parte de las actividades del Repair Café especial que, el próximo día 20 de octubre, conmemorará el Día Internacional de la Reparación, que se celebra el tercer sábado de octubre de cada año. Un evento en el que se trata de llevar a la ciudadanía la idea de que, antes de tirar y comprar, hay que plantearse la reparación, en un planeta donde cada año se generan 53 millones de toneladas de e-waste o basura electrónica en el mundo, lo que equivale al peso de 350 cruceros en electrónica, según detallan en www.repair.eu. Un mensaje que se busca consolidar, especialmente, entre los más pequeños de la casa, y gracias al cual se pone en valor la labor de los reparadores solidarios que acuden puntualmente a su cita mensual con la reparación. Una cita especial que se enmarca en el movimiento internacional Repair Café, una iniciativa que busca, por un lado, reducir la generación de basura, y por otro, concienciar sobre un problema que crece cada. Un evento internacional de útiles caseros organizado en Zaragoza por Herco Suministros Industriales, en colaboración con Rebeca Cavero y David Lizarazo de UNIZAR y el Ayuntamiento de Zaragoza, que tiene lugar el tercer viernes de cada mes en Etopia Centro de Arte y Tecnología. Y que podemos conocer mejor gracias al testimonio, de primera mano, de parte de sus reparadores voluntarios, artífices del más de un millar de reparaciones realizadas en Repair Café desde sus inicios, entre las que se encuentran variopintos artículos como Autocross, radios de madera, bailarinas de cuerda o máquinas Nespresso.
El evento del próximo día 20 de octubre, para cuya participación es necesaria la inscripción en este enlace, se realiza en conmemoración del Día Internacional de la Reparación, un derecho de los consumidores reconocido por el Parlamento Europeo desde hace más de diez años, explica Carlos Sánchez, gerente de Herco, empresa organizadora de la iniciativa. “Entre las medidas que los eurodiputados van a demandar en la próxima propuesta legislativa destacan los incentivos para que los consumidores opten por reparar en vez de por sustituir los productos, o para que puedan recibir un aparato de sustitución mientras dure la reparación”, apunta Sánchez. Unas propuestas que van en línea con el Plan de Acción para la Economía Circular presentado por la Comisión Europea en 2020, y que engarza directamente con movimientos como Repair Café. Una reunión que se celebra el tercer viernes de cada mes en Etopia (Zaragoza), gracias al cual, por el simbólico precio de un café, una comunidad de reparadores voluntarios arregla aparatos que, de otra manera, acabarían en el cubo de la basura.
Los voluntarios, el corazón de Repair Café
Los voluntarios son el corazón y razón de ser de Repair Café, tanto en esta edición especial (en la que el café podrá tomarse con un trocito de tarta), como en las ediciones habituales. Especialistas solidarios como Benjamín Onia (Vilanova i la Geltrú, 1980), un electricista que lleva seis años como preparador de pedidos en Herco, y otros cuatro como reparador solidario en Repair Café, especialmente en las áreas de la electrónica y la mecánica. “Realmente merece la pena ver cómo reparando algo que posiblemente iba a terminar en la basura, ayudas a reciclar, y ayudas a las personas. En ocasiones son aparatos que van ligados a algo emocional, por ser heredados o conllevar algún sentimiento”, explica. Un reparador que se siente “útil y realizado” con un trabajo voluntario en el que ha llegado a reparar hasta un reloj antiguo de bolas, y que le ha traído grandes momentos, como esos en los que personas agradecidas por su labor vuelven en ediciones posteriores con galletas o algún presente, recuerda.
Una gratitud que él mismo experimentó tras las tormentas del pasado mes de julio de 2023 que destrozaron las instalaciones de la empresa organizadora de Repair Café, ya que gracias a la solidaridad de trabajadores, familias, cliente y proveedores la empresa pudo abrir, a pesar del desastre, tan solo tres días después de los acontecimientos. “Ves que al final Herco es una familia que componen no solo las personas que trabajan allí, sino también los clientes, vecinos y la familia de los trabajadores”, rememora.
Un sentimiento que comparte su compañero Alejandro Murillo (Zaragoza, 1990), con seis meses de experiencia en preparación de pedidos, transporte y ventas en el mostrador que lleva cinco meses como reparador solidario. Y es que salir adelante tras los destrozos ocasionados por la fuerza del agua “supuso un reto más, no me permito parar ni tirar la toalla. Las personas en momentos así siempre sacan fuerzas, porque ayer fuimos nosotros, pero mañana puede ser el vecino. Unidos somos siempre más fuertes, y lo ves en momento así”, manifiesta.
Una experiencia solidaria que se une a su trabajo altruista en Repair Café. Con un doble grado en Diseño y Arquitectura de Interiores, Alejandro aporta sus conocimientos, particularmente en el terreno de la mecánica, a un evento al que llegó fruto de sus ganas de saber. “Me considero una persona curiosa y con inquietudes, ya conocía el movimiento, así que fue el momento perfecto para aprender sobre electrónica, tema que no domino. Además, es una forma de encontrar soluciones a problemas habituales, de objetos tan cotidianos como puede ser una tostadora”, comenta. Un movimiento en el que se ha topado con reparaciones muy especiales, como el que fue su primer arreglo: una lijadora orbital que ya era del padre de la mujer que la llevó a reparar. Un evento al que, sin duda, anima a unirse como reparador. “No es necesario saber de ningún tema en particular, tan solo hay que ser curioso y querer aprender con cada reto o reparación. Afortunadamente, tenemos compañeros muy profesionales, entre unos y otros conseguiremos dar con la solución para la reparación”, explica.
Si vienes un mes, ¡querrás venir todos!
El evento especial que tiene preparado Herco Suministros Industriales para la celebración del Día Internacional de la Reparación tiene como lema un gran reto: lograr quince reparaciones en una sola tarde. Una cita de tres horas de duración en la que, además de las habituales reparaciones, los voluntarios explicarán en qué consiste esta iniciativa mensual, se disfrutará de un buen café (con tarta) cedido por Eboca, y se sortearán, finalmente dos kits de reparación: uno para adultos y otro para niños. “Entre los objetivos que nos hemos propuesto está llevar a la ciudadanía el sentimiento de que antes de tirar y comprar, hay que plantearse reparar. Reparar es un derecho, y existen empresas y personas que tienen los conocimientos y las herramientas para hacerlo”, comenta el gerente de la empresa organizadora.
Una tarea, la de la reparación, para la cual son imprescindibles reparadores como David (Zaragoza, 1976), que lleva ya un año en Repair Café (y cuatro décadas como reparador). Este ingeniero industrial especializado en la reparación de juguetes aterrizó en Repair Café con el objetivo de contribuir a mantener operativos los aparatos que allí se arreglan. Con un pingball como el objeto más peculiar que le ha tocado abordar, reconoce que se emociona con las historias personales que allí escucha en relación con la importancia que los objetos a reparar tienen para las personas que allí los llevan. “Comparten un pedacito de su alma”, apunta. Una tarea solidaria que considera enriquecedora, y que recomienda probar. “El que cuida lo que tiene, da valor a las cosas y a las personas. Si tú puedes ayudar a conseguirlo, siempre conseguirás su respeto. Y si además enseñas a reparar, tendrás su admiración y gratitud”, comenta.
Victoria Montañés (Zaragoza, 1983) es otra de las reparadoras voluntarias de un evento, Repair Café, en el que lleva participando un año, aunque lleve ya toda una vida como reparadora. “El que tiene inquietud por reparar, la tiene desde niño”, asevera. Con un grado universitario en Ingeniería de Diseño Industrial y Desarrollo de Producto, Victoria suele arreglar en Repair Café pequeño electrodoméstico, y se unió como voluntaria al evento por varias razones. “Por un lado, aprender junto a otros reparadores cómo hacer el diagnóstico y la reparación de un objeto. La inquietud de destripar aparatos para ver cómo funcionan. Pero, sobre todo, quería aprovechar esta inquietud para hacer algo provechoso y ayudar a los demás”, explica.
Un arrancador de baterías de coches es el artículo más peculiar que a Victoria le ha tocado reparar, y su momento más emotivo tuvo lugar en un Repair Café navideño. “Un niño estuvo superpendiente mientras le soldaba el altavoz a su robot de juguete, y quedó muy agradecido”, recuerda. Victoria se confiesa una persona “muy comprometida con el reciclaje y la optimización de recursos, está genial que la gente venga y vea que sus aparatos rotos tienen una segunda oportunidad”, apunta. Una reparadora que no tiene duda de que, quien no viene como reparador, es porque no conoce Repair Café. “Creo que quien tiene este interés y esta inquietud, no necesita que le convenzan, más bien saber dónde apuntarse. Pero si conociera a alguien que podría encajar, le diría: vente este mes y ¡querrás venir todos!”, concluye.
Desmontar una Nespresso… ¡y que se arregle pulsando un botón!
El evento del próximo viernes día 20 de octubre forma parte de la iniciativa Repair Café, impulsada en Zaragoza por Herco, Suministros Industriales. Una idea que nació en Amsterdam en 2007 y que, desde entonces se ha extendido por todo el planeta, con presencia en países como Japón, Australia, Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Chile, Brasil, India, Ghana o Egipto. Uno de los eventos estrella que organiza la empresa radicada en Cuarte de Huerva, gracias al cual se han reparado, en Zaragoza, más de un millar de dispositivos desde su primera sede en La Azucarera.
Un espacio municipal zaragozano en el que ya era reparador Adolfo Amella, licenciado en Física y uno de los voluntarios más veteranos de Repair Café. Y es que este profesor de Secundaria lleva como reparador de Repair Café desde sus inicios, sobre todo en todo aquello que tiene que ver con la electricidad y la electrónica, su especialidad. “Es muy agradable que alguien se vaya contento y evitar así haber tirado un objeto a la basura”, explica Amella, un reparador cuyo objeto más peculiar que le ha tocado reparar es un Autocross, “un juguete que recordaba yo de crío, que me entusiasmaba”, confiesa.
Aunque su momento más divertido vivido durante este último lustro en Repair Café fue “cuando desmontamos entera una cafetera Nespresso (que son un infierno de desmontar), y cuando estaba completamente desmontada, nos vio otro reparador y dijo: `creo que, pulsando el botón de una manera concreta, se reiniciar y funciona´. ¡Efectivamente, no habría hecho falta desmontar, ja ja ja! La montamos y se la llevaron reseteada y funcionando”, sonríe. Adolfo anima a todo o toda “manitas” a que se sume a este movimiento, ya que, según comenta, “es una actividad muy agradable, el rato se pasa enseguida”.
Otro de los voluntarios que llevan en Repair Café desde sus inicios es Ángel González (Valencia, 1982), profesional de la automoción y la reparación de mecánica y electricidad de vehículos. “Me gusta reparar cosas”, manifiesta este “manitas” que ha arreglado de todo en Repair Café, hasta una radio de madera. Un apasionado del movimiento que disfruta especialmente esos momentos en los que “nos juntamos entre varios para alguna reparación”, o que los usuarios “tienen mucho interés por ver cómo se puede reparar algo”.
Un buen ambiente en el que todos aprenden de todos
Repair Café y su evento especial con motivo del Día Internacional de la Reparación está impulsado en Zaragoza por la empresa Herco, una compañía que se encuentra inmersa en un proceso constante de transformación. “La incertidumbre ha venido para quedarse, y en el caso de una empresa como la nuestra, con más de 55 años de existencia, hemos tenido que navegar entre periodos de crisis”, explica su gerente, Carlos Sánchez. “Aunque sea un tópico, no deja de ser cierto que cada crisis es una oportunidad, y en nuestro caso de cada una de ellas hemos salido reforzados. La fórmula para sobrevivir: adaptación al medio, confianza en las personas que forman parte de la empresa, mucho trabajo y dedicación máxima”, apunta.
Unos valores presentes en cada uno de los voluntarios que forman parte de Repair Café, como José Cortés (Zaragoza, 2002), quien a pesar de ser uno de los más jóvenes, lleva ya dos años como reparador. En la actualidad se encuentra en el tercer curso de Ingeniería Mecánica, y todo lo que tenga que ver con electrónica o mecánica es su especialidad. Tal y como apunta, José lleva “toda la vida” reparando objetos, algo que le “resulta divertido”. Así como un reto. Como lo fue aquel sistema de fluorescentes que reparó y pasó a led en Repair Café, uno de tantos arreglos interesantes que le ha tocado experimentar. Y que le ha granjeado una enorme gratitud por parte de los usuarios. “A veces nos quieren pagar o agradecer con cosas, pero ninguno aceptamos dinero, lo hacemos voluntariamente”, explica, mientras apunta cómo ha podido ser testigo de cómo muchos objetos de los que le llegan han sido creados de origen para durar poco. “Gracias a arreglar objetos puedo ver las deficiencias de muchos productos, que a veces tienen fallos muy descarados, que están hechos para que, si se rompe la mínima cosa, todo deje de funcionar. No pasa con todas las marcas, pero se nota cuando las cosas están bien hechas”, manifiesta.
Y es que en Repair Café siempre hacen falta voluntarios, como José Luis Benedi (Zaragoza, 1974), especialista en electrónica por formación y profesión que se unió a Repair Café por la posibilidad de recuperar aparatos que pueden tener una vida más larga. Una bailarina de cuerda es uno de los objetos más peculiares que le ha tocado reparar, aunque reconoce que disfruta especialmente cuando los usuarios del servicio se acercan con antigüedades u objetos con valor sentimental. Y cuando la solidaridad de la que está impregnado este movimiento sale un poco más a la luz. “Cuando alguna avería se resiste, nos echamos una mano entre todos”, confiesa este convencido de Repair Café. “Si tienes algo de tiempo, vente, que es un ambiente muy majo, la gente que reparamos somos muy majos, y también se aprende unos de otros”, anima.
La agenda del evento especial del 20 de octubre de 2023
El viernes 20 de octubre se celebra este nuevo Repair Café especial en el laboratorio de fabricación digital de Etopia, en el que se conmemorará el Día Internacional de la Reparación, que se celebra el sábado 21 de octubre. El objetivo que se ha marcado Herco Suministros Industriales para esta cita es conseguir quince reparaciones en una tarde. Además, la sesión contará con otras propuestas, y desde Herco se anima a acudir con amigos y familia.
Agenda de la jornada:
- 17:00 a 18:00 horas: Primera sesión de reparación (6 plazas). Es necesaria inscripción para llevar un aparato electrónico, eléctrico o mecánico estropeado para que sea reparado con la ayuda de los reparadores voluntarios.
- 18:00 a 18:30 horas: “¿Repair Café? ¿Qué es eso?”. Los organizadores y reparadores que participan en Repair Café explican en qué consiste el movimiento, al tiempo que se disfruta de un café y un trozo de tarta.
- 18:30 a 20:00 horas: Segunda sesión de reparación (9 plazas). “¿Alcanzaremos nuestro objetivo?”
- 20:00 horas: Sorteo de un kit de reparación para adultos y un kit de reparación para niños entre todos los visitantes y participantes que hayan pasado por Repair Café.
Desde Herco se recuerda que, si se lleva a reparar un aparato electrónico, es necesario acercar también las pilas o el cargador que necesite. También se recuerda que no se trata de un servicio profesional, sino altruista, y que se admite un objeto a reparar por persona previa inscripción.
Otras iniciativas solidarias de Herco, Suministros Industriales
Además de Repair Café, Herco Suministros Industriales organiza y colabora en otras iniciativas. Por ello, dentro del marco de su política de RSC son patrocinadores de las Aragón Skills, las olimpiadas de la formación profesional, participan en los Premios Don Bosco de Salesianos, y colaboran con el Proyecto MotoStudent de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Zaragoza. Se trata de un proyecto a nivel nacional que consiste en la mentorización y tutorización de estudiantes de Ingeniería en el diseño y fabricación, desde cero, de una moto de carreras. Una vez concluido el proyecto, que suele durar dos años, realizan una carrera en Motorland (Alcañiz).
Aunque, sin duda, uno de los principales proyectos de Herco fuera de Repair Café es su Jornada Solidaria, una sesión informativa en la que, a través de un evento de donación de sangre, se informa a las personas participantes sobre cómo funciona la donación de médula ósea. La jornada, que ha tenido ya media docena de ediciones, se realiza junto con la Asociación Dona Médula Aragón, de la cual Herco es socia de honor.
Todo un evento al que se unen otras actividades que realiza Herco, como el Club NoSoloTornillos, en el que se realizan talleres de bricolaje, deporte y voluntariado aptos para toda la familia. Un club que nace con la misión de ser un punto de encuentro de clientes, trabajadores y colaboradores de Herco, para el mayor aprovechamiento y crecimiento personal y profesional, explica Carlos Sánchez.