Japón, un mercado maduro, libre, rico y fiable donde se valora el negocio a largo plazo

Con una población de 125 millones de personas y una economía que se sitúa como tercera del mundo, Japón se presenta como un mercado libre, rico y fiable, con un alto índice de confianza que solamente superan EE.UU, Alemania y Canadá. Una economía que está saliendo del estancamiento que ha vivido durante más de treinta años, y que prefiere hacer negocio, principalmente, con aquellos países con los que ha firmado un tratado de libre comercio. Energías renovables, digitalización, automoción, ferrocarril y agroalimentación son parte de los sectores con mayores oportunidades de negocio, en un país en el que la calidad, la sostenibilidad y las relaciones de confianza son valores a tener en cuenta. Estas son algunas de las cuestiones fundamentales que se abordaron el pasado miércoles en la segunda jornada del Ciclo de Oportunidades de Negocio en Asia, organizado por este diario. En la cita, tres expertos mostraron la realidad de un mercado maduro en el que la paciencia es condición sine qua non para hacer negocios que, una vez consolidados, perduran en el tiempo.

Alrededor de 30 personas estuvieron presentes en el nuevo espacio Xplora de Ibercaja en esta segunda parada del ciclo, patrocinado por Levante S.A., Ecosistema MAS de Ibercaja Empresas, y Aragón Exterior (Arex), y que contó con colaboradores como ARPA, Eboca, JEVASC, Navarro Llima abogados, APB Marketing Promocional y Alfredo Cortés Consultores S.L. En ella, Julio Díaz-Terán, Economista Senior de la Embajada del Japón en España, el doctor Mario Malo, Profesor Asociado en el máster de Estudios Globales de Asia Oriental de la Universidad Autónoma de Barcelona, y Jaime J. Navarro, fundador de Navarro Llima Abogados S.L. y consultor de empresas en Japón, mostraron sus conocimientos sobre el país y ofrecieron distintas claves para afrontar la generación de negocios en Japón.

El encargado de abrir la jornada fue el responsable de Comercio Exterior y Desarrollo Comercial de Banca de Empresas Ibercaja, José Ignacio Toro, quien dio la bienvenida a los presentes a Xplora, un espacio “nuevo que pretendemos que sea un lugar de encuentro profesional y entre personas”. La jornada, celebrada el 21 de septiembre de 2023 dentro de las actividades programadas en el marco del plan de Ibercaja Ecosistema Más, tiene una “utilidad indudable“, comenta Toro, ya que el “reto de la internacionalización es algo que cualquier empresa, en su ciclo de vida, debería plantearse“. Una tarea que “no es fácil”, confiesa, por lo que es esencial, a su juicio, “buscar apoyos y palancas que nos ayuden a salir al exterior”.

El director de Go Aragón, Alfredo Cortés, fue el encargado de dirigir el acto, presentar las intervenciones y moderar el turno final de preguntas, en la que los asistentes y los ponentes pudieron intercambiar inquietudes y dudas acerca del mercado japonés.

La economía japonesa está saliendo de un periodo de estancamiento que ha durado más de treinta años

El primero en tomar la palabra fue Julio Díaz-Terán, Economista Senior de la Embajada del Japón en España, quien realizó un análisis de la situación económica actual del país asiático, así como una presentación de las oportunidades de negocio que las empresas españolas y aragonesas pueden encontrar en Japón. Según apunta Díaz-Terán, “las perspectivas económicas, dentro de la incertidumbre que existe, son bastante buenas. Después de atravesar dos impactos muy negativos, como han sido el Covid y la guerra en Ucrania, las previsiones de crecimiento para este año son del 1,8%. La previsión para el año que viene es superior al 1%, por lo tanto, se augura una salida del ciclo de estancamiento y deflación en el que ha estado la economía japonesa durante más de treinta años“.

Con una inflación estimada del 2,7% para fin de año y del 2,2% para el año próximo, así como con crecimientos por encima del 1%, “Japón, después de muchísimos años, pasa a ser un país normal: con cierta inflación y con crecimiento“, apunta. Una evolución que también se nota en la bolsa, con un índice Nikkei situado en los 33.000 puntos y una bolsa en máximos, explica el economista. “Y todo ello con una política del Banco Central de Japón de tipos de interés negativos. Esto sorprende mucho, porque tanto la Reserva Federal como el Banco Central Europeo están subiendo los tipos de interés”, apunta.

Además, tal y como valora, los “riesgos geopolíticos de este momento configuran a Japón como alternativa a China en la cadena de suministros en los próximos años. Son muy recientes los problemas que ha habido, concretamente con el tema de los semiconductores, que han llevado a que grandes empresas americanas hayan hecho inversiones recientes en estos productos en Japón. Y también aspectos de carácter geopolítico configuran a Japón como un centro dentro de Asia, donde las inversiones son, a día de hoy, cada vez más interesantes”.

Unos datos propicios para el negocio con el país asiático que, por contra, no se reflejan en un incremento de la actividad económica de empresas españolas este mercado, ya que tan solo el 0,8% de las exportaciones españolas tienen como destino Japón. Un porcentaje dentro del cual Aragón se sitúa como el cuarto mayor exportador español a este destino, con el 8% de las exportaciones españolas.

Respecto a los sectores de interés para las empresas españolas, Díaz-Terán mencionó que, tras la crisis de la central nuclear de Fukushima, las energías renovables han cobrado una “dimensión enorme”, por lo que el economista ve en este sector una importante oportunidad de negocio con Japón. La digitalización, la automoción, el ferrocarril y la agroalimentación serían otros de los sectores con oportunidades para las compañías nacionales.

Unas empresas que cuentan con una ventaja competitiva respecto a otros países del mundo gracias al Acuerdo de Asociación Económica que la Unión Europea firmó en 2019 con el país nipón, puesto que, según comenta, el 80% del negocio que hace Japón lo realiza con estados con los que ha firmado un tratado de libre comercio. Además, este tratado ha supuesto una rebaja del 15% de los aranceles, una circunstancia que facilita la actividad económica entre las empresas de ambos países.

Finalmente, Julio Díaz-Terán puso sobre la mesa el hecho de que el mercado japonés es “libre, rico y fiable” y de que es el cuarto a nivel mundial en el índice de confianza de IDE, detrás de EE.UU, Alemania y Canadá. Unas cifras que ponen en valor una economía que, según concluye, cuenta con un ecosistema de innovación abierto al mundo, excelentes recursos humanos y un excelente entorno empresarial y marco legal.

Respeto, contención y jerarquía como elementos claves de la negociación

El segundo de los ponentes fue el doctor Mario Malo, Profesor Asociado en el Máster de Estudios Globales de Asia Oriental en la Universidad Autónoma de Barcelona, quien centró su discurso en la comunicación intercultural y las estrategias de negociación en Japón desde el punto de vista sociocultural.

Este Profesor Colaborador en el Máster de Estudios Japoneses de la Universidad de Zaragoza realizó toda una “semblanza de elementos socioculturales y del plano comunicativo que cualquier empresario debería tener en cuenta antes de hacer negocios en la esfera nipona. Cada vez que se afrontan negociaciones en el ámbito económico en un mundo tan globalizado, el factor cultural a veces no lo tenemos tan en cuenta. Pero si queremos tener negocios con Japón, sí que debemos tenerlo en cuenta”.

De esta forma, Malo comenzó explicando de qué manera las particularidades geográficas (como su insularidad y el hecho de que el 70% de su orografía sea montañosa), históricas y socioculturales han marcado una forma de vida y de hacer negocios particular que es necesario conocer antes de establecer contacto con empresas procedentes de este país. De esta forma, el profesor puso sobre la mesa el hecho de que, en Japón, apenas el 30% de la superficie está disponible para vivir y cultivar, en un país de 125 millones de habitantes, algo que deriva en unas deficiencias en el campo agroalimentario que les lleva a requerir grandes importaciones tanto cárnicas como hortofrutícolas.

Una realidad que se une a los procesos básicos de socialización japoneses, en los que los antiguos sistemas familiares basados en la primogenitura continúan teniendo una raigambre que se traslada también al ámbito social y empresarial. Un tipo de relación que les lleva a ver a la empresa como una extensión de la familia, y en la que la identificación y lealtad con la compañía son absolutas. Y que les lleva también a la realización de muchas horas de trabajo, al desarrollo de una carrera profesional larga (en la que la antigüedad en la empresa tiene gran valor), interdependencia y cooperación. Unas empresas en las que el individuo obtiene reconocimiento siempre y cuando su acción haya beneficiado al grupo.

La realidad geopolítica y los procesos de socialización japoneses también influyen, explica Malo, en los procesos de negociación en Japón. El conocimiento de los conceptos de Nemawashi (construcción de relaciones de confianza) y de Ringi-Seido / Ringi-Sho (enfoque grupal y consenso formal), y de Wa (armonía), son vistos como una señal de respecto a los procesos culturales locales que se aprecia de forma positiva por los negociadores japoneses. Unas reuniones y charlas en las que es importante conocer las relaciones jerárquicas y paternalistas entre jefes y empleados que se trasladan incluso al uso de los espacios en la sala de reunión.

Finalmente, el profesor recomienda el uso de un lenguaje corporal contenido, no mirar a los ojos de forma directa, usar expresiones faciales calmadas y no tocar a la otra persona, un gesto este último que se percibe como de mala educación. La destreza en el uso de las formas respetuosas de comunicación (Keigo), como el Teinego (la forma cortés), el Sonkeigo (la forma honorífica) o el Kenmoogo (la forma humilde), puede determinar, comenta, el éxito de la negociación.

La paciencia tiene en Japón una gran recompensa

El último en tomar la palabra fue Jaime J. Navarro, socio en Navarro Llima Abogados S.L y consultor de empresas en Japón a través de su consultoría Nichiza, y gracias también a Levante S.L., una empresa de nueva creación de capital español y japonés que busca establecer puentes entre ambos países para que pequeñas y medianas empresas puedan hacer negocios con mayor facilidad en Japón. “Hemos visto que las barreras son muy importantes”, apunta Navarro.

Con una población de 125 millones de personas, y con una economía que se sitúa en el tercer puesto del mundo por volumen de PIB, Japón es un destino interesante, según comenta Navarro, para empresas que puedan, por un lado, ofrecer productos y servicios de alto valor añadido y de gran calidad, y por otro, que cuenten con una capacidad financiera suficiente para soportar un periodo medio de implantación de dos años que implica el negocio con empresas del país asiático.

Además, el abogado recuerda que el japonés es un mercado maduro “donde te vas a encontrar a todos tus competidores”, por lo que la propuesta de valor debe ser “muy alta” para que pueda captar el interés de la empresa nipona. Un ecosistema económico donde las relaciones son siempre a largo plazo, en el que impera la sobreoferta y donde se vive y trabaja en japonés, no en inglés, por lo que también recomienda esforzarse por contar con un partner local. “Pese a la complejidad, la recompensa merece la pena, puesto que puedes lograr un negocio recurrente a largo plazo”, explica.

Finalmente, entre los sectores en los que observa, por su experiencia, oportunidades de negocio, serían el agroalimentario (vino, aceite, Jamón, alfalfa), la gastronomía, la moda y el lujo, la sostenibilidad, la automoción, la maquinaria de construcción, el turismo, la cultura y el deporte y los servicios a hispanohablantes residentes en Japón.

Con ello concluyó esta segunda parada del Ciclo de Oportunidades de Negocio en Asia de Go Aragón, cuya siguiente cita se celebrará el 3 de octubre con India, y que concluirá el 8 de noviembre con una jornada dedicada a los aspectos técnicos relacionados con la expansión comercial en Asia.