“El Plan del Mayor nace para adecuar los servicios sociales a las necesidades de una generación que demanda una nueva atención, para acompañarles en un recorrido que tiene diferentes etapas y para ofrecer a estas personas el papel activo y protagonista que siguen teniendo en esta etapa de su vida. Hablamos de una generación de cambio, artífice de grandes logros sociales, y queremos hacer este cambio con ellos”. Con estas palabras ha presentado esta mañana la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, el Plan del Mayor. Generación de Cambio. “Se trata –ha incidido la consejera- en un eje estratégico del Gobierno de Aragón sobre el que va a pivotar hasta el final de la legislatura toda la atención que ya se presta a los mayores, así como los nuevos servicios e infraestructuras que se están poniendo en marcha, impregnados por la filosofía de atención centrada en la persona”. En cifras, este plan recoge 49 actuaciones (20 ya asentadas y 29 nuevas); implica una financiación extra de 66,7 millones de euros de aquí a 2023 (que se suma a los 189,8 que anualmente destina Ciudadanía a la atención a los mayores) y persigue llegar a 204.101 aragoneses.
Entre las 29 nuevas medidas que plantea esta apuesta del Ejecutivo por los mayores destaca la construcción de dos complejos residenciales multiservicio abiertos a la comunidad y el entorno, en Ateca y en Valdefierro (Zaragoza); la implantación de un nuevo modelo de gestión y atención residencial (apoyado por la inversión de los fondos de resiliencia); la modificación del decreto de prestaciones de la dependencia para agilizar los procesos; o la puesta en valor del papel social de los mayores, haciéndolos partícipes de los cambios, como ya se está realizando en la red de 31hogares del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS). “Este plan busca también –ha subrayado María Victoria Broto- proyectar la imagen y el papel que realmente tienen hoy los mayores en la sociedad: un papel activo y protagonista”.
La consejera –que ha presentado el plan junto a la directora gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), Noelia Carbó- ha subrayado la importancia de centrar buena parte de la inversión y la acción del Gobierno en este colectivo por varias razones. “Nos encontramos ante una forma de hacernos mayores diferente, se plantean nuevas necesidades a las que debemos ser capaces de dar respuesta; y la jubilación ya no es el final de nada, sino la continuidad de un proyecto vital que debemos apoyar desde las instituciones fomentando la prevención, los cuidados y la autonomía”, ha explicado María Victoria Broto. La consejera ha recordado también que la quinta parte de la población de Aragón supera los 65 años y que, según el INE, esta tasa crecerá hasta el 28,3% en 2035. También ha recordado que los mayores han sido el colectivo más golpeado por la pandemia; y que esta situación ha puesto sobre la mesa la necesidad de seguir impulsando los cambios en el modelo que ya estaban previstos.
En esta línea, Broto ha señalado que el Plan del Mayor. Generación de Cambio se ha organizado en torno a cuatro áreas de acción: promover el protagonismo de los mayores, su integración y participación en la sociedad; proteger a los mayores en situación de vulnerabilidad; ofrecer una atención continuada en el entorno a lo largo de toda la vida; y flexibilizar y ajustar el Sistema Público de Servicios Sociales a las expectativas de los mayores y sus familias. Entre las acciones principales, destaca la voluntad de acompañar a las personas en las necesidades que se les vayan presentando a lo largo de su vida, adecuando e implementando la atención si su grado de autonomía o dependencia los precisa. “Además –ha subrayado la consejera-, se pone especial atención en la prevención, base fundamental para que las personas podamos mantener nuestra autonomía y permanecer el mayor tiempo posible en nuestro entorno”.
La gerente del IASS ha desglosado algunas de las 29 medidas nuevas que prevé el Plan, y que se suman a las 20 que el Gobierno de Aragón ya tiene en marcha para atender a los mayores de la Comunidad. “Todas van dirigidas a mejorar la calidad de vida y la atención de los mayores, a mejorar la integración y la participación, a fomentar el envejecimiento activo o a descentralizar los servicios para promover el arraigo al medio rural”, ha indicado Carbó.
Nuevas infraestructuras
En concreto, las medidas que recoge el plan pasan por la construcción de dos nuevos complejos residenciales multiservicio –en Valdefierro y en Ateca- con una inversión global de 27,9 millones y que serán espacios abiertos a la comunidad en la que se ubican. Se trata de proyectos innovadores que implican la construcción de complejo residencial más centros de día, con soluciones habitacionales y servicios abiertos a la comunidad. En concreto, para el futuro centro de Ateca se cuenta con un presupuesto de 6,5 millones, que permitirán construir una residencia de mayores en una parcela cedida por el Ayuntamiento. El complejo de Valdefierro es el del antiguo centro de menores del Buen Pastor, que va a transformarse en residencia, viviendas tuteladas y servicios comunitarios. Se cuenta para ellos con una inversión de 21,4 millones. Entre ambos centros se crearán 296 plazas nuevas, aunque la presencia de estos complejos beneficiará a toda la comunidad en la que se implantan, al ser espacios de integración que prevén la coordinación y cooperación con otros servicios.
La transformación de las residencias, basada en el modelo de atención centrada en la persona, alcanza a los centros públicos de la Comunidad y también a aquellos que cuentan con plazas concertadas, y se insertan, por tanto, en el servicio que presta el IASS. En concreto, en nueve residencias del IASS se van a crear 20 unidades de convivencia que supondrán la adaptación de 250 plazas, que recrearán ambientes hogareños y personalizados. Para esta medida hay prevista una inversión de 12,5 millones de euros procedente del Fondo de Recuperación y Resiliencia. Las obras se van a llevar a cabo en los centros de Borja, Utrillas, Albarracín, Javalambre, Sagrada Familia, Ciudad de Huesca, Romareda, Hogar Doz de Tarazona y el Centro Asistencial de Calatayud.
Del mismo modo, se apoyará con 13 millones de euros la transformación y adaptación de los centros que tienen plazas concertadas, con cargo también a los fondos de Recuperación y Resiliencia. Las subvenciones, que ya ha sido adjudicadas, llegan a 71 entidades locales, 40 sociales y 35 mercantiles.
Las medidas del Plan del Mayor contemplan también la asistencia técnica a las comarcas, para apoyar a las entidades locales en la atención y protección de los mayores fomentando la prevención y su permanencia en el entorno; así como la implementación de servicios tecnológicos integrados para la prevención que permitan identificar y alertar de forma precoz sobre situaciones de riesgo (esta medida llegará a cerca de 1.500 personas). Además, se anuncia la actualización de la normativa relativa a la calidad de los centros y servicios privados.
Además, se está trabajando ya en la implantación de nuevos programas de envejecimiento activo para mejorar la calidad de vida de las personas que viven en residencias y que se encuentran en situación de dependencia (esta medida llegará a más de 1.800 usuarios) o en la modernización de los sistemas de comunicación y tecnologías de la información en residencias (que permitan mejorar las redes de conexión y los equipamientos); así como en una línea de investigación para constatar con qué redes de apoyo cuentan los mayores en Aragón y dónde es necesario reforzar.
También se va a elaborar una guía de recursos organizada en función de la etapa vital para mejorar la información sobre los servicios existentes y facilitar el acceso a los mismos; se va a fomentar el uso de herramientas digitales en el colectivo de las personas mayores (con dotación de aulas móviles que podrían llegar a 7.000 mayores de 55 años en todo Aragón) y se está revisando el papel de los hogares de personas mayores (hay 31 en Aragón, con 109.000 socios y se está trabajando con ellos en su modelo de futuro).
El plan prevé también la promoción de la nueva imagen de las personas mayores (la campaña comunicativa del Plan del Mayor que ya está funcionando y se reforzará en los medios de comunicación en las próximas semanas es parte de esta iniciativa) así como la ampliación de los procesos participativos para que puedan formar parte del diseño y la planificación de los recursos.
“El objetivo final –ha dicho la consejera- es transformar el concepto de atención a las personas mayores en la Comunidad, para darles un papel protagonista, fomentar la autonomía y permanencia en el entorno el mayor tiempo posible y adecuar los servicios a esta nueva filosofía”. En esta línea, ha dicho María Victoria Broto, “debemos ser conscientes de que la jubilación no es sinónimo de ningún final: tras ella continúa el proyecto vital de una persona, queda un camino fecundo por delante y un papel social cada vez más importante y reconocido, y en él nos queremos centrar”.
Muy interesante,pero echo en falta que no se recoja la posiblidad de vivir en edificios con apartamentos independientes pero con servicios comunes.Un ejemplo es el edificio de Sagasta 5 en Zaragoza,un ejemplo a imitar y que sigue suscitando el interés en diferentes lugares de España.
Saludos.
C.C.